¿Por qué seguimos fracasando?

 ¿Por qué seguimos fracasando?

Roberto Semanate

Hace casi una década los economistas Daron Acemoglu, y James A. Robinson (2012)​, publicaban  su obra  Why nations fail?: The origins of Power, Prosperity and Poverty; donde se aborda históricamente los factores para que los países  o territorios fracasen o sean prósperos. En un análisis de política comparada, se identifica que las instituciones (leyes) serían el factor más representativo; por encima de hipótesis como la religión, geografía, el clima, cultura e inclusive la ignorancia de los líderes, estos son descartados luego de contrastar territorios con similitudes, pero con resultados económicos diferentes, como: Corea del Norte / Corea del Sur, Nogales (Arizona EU) / Nogales (Sonora México), los países dentro de América.

Este descarte puede aplicarse brevemente al caso ecuatoriano, por ejemplo, según las primeras estadísticas oficiales sobre filiación religiosa en el Ecuador del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), casi el 92% dice profesar una religión y de aquellos el 80% son católicos, independientemente del estrato social al que pertenece. Esto se refuerza cuando desde el primer al quinto quintil de los encuestados, coinciden en ubicar a la religión, en cuarto lugar de importancia en su vida. (Instituto Nacional de estadísticas y censos, 2012)

Otra hipótesis como la geografía no es decisivo, hay que observar  que ciudades enteras comparten la misma geografía y a la vez tienen zonas con rasgos económicamente diferentes, por ejemplo el norte o sur de la capital, o los sectores exclusivos de Guayaquil con sus suburbios, y no nos referimos a la diferencia en infraestructura de centros comerciales, bancos, establecimientos educativos o edificios sostenibles, si no a las facilidades para acceder a servicios básicos, sistemas de transporte, y mercados. Este criterio, aplicaría también para el clima, más aún cuando en el país hay dos regiones con climas diferentes, Sierra y Costa, donde existen ciudades más prosperas que otras, ubicadas indistintamente en estas regiones sin condicionarse a una menor o mayor temperatura.

De manera intuitiva se identifica que la cultura, idioma y costumbres son similares entre indígenas de la sierra centro, con la sierra norte (Otavalo), sin embargo, los últimos muestran una mayor acumulación de recursos por la comercialización externa e innovación en sus telares, más aún si se segmenta por zonas rurales y urbanas en cada grupo.

Finalmente, la ignorancia de los líderes cada vez pierde menos validez ya que en un mundo globalizado y con la documentación existente sobre políticas tomadas por países o ciudades prósperas, más el manejo masivo de TIC, hace menos probable que la ignorancia se convierta en un justificativo para tomar decisiones erróneas, es más seguro que las mismas responden a intereses políticos y a la permisibilidad de las instituciones.

Una vez descartadas estas hipótesis los autores indican que –El éxito económico de los países difiere debido a las diferencias entre sus instituciones, a las reglas que influyen en cómo funciona la economía y a los incentivos que motivan a las personas. Existen varios ejemplos, pero los más prácticos en este contexto son:

Diferencias entre américa del norte y américa del sur: las instituciones económicas en la colonización española concebían que el trabajo (explotación de minas, cultivos) sea responsabilidad de los indios, con una carga representativa de tributos y prácticamente sin propiedad privada, las rentas iban a manos de los españoles. Con la independencia las instituciones económicas tuvieron cambios leves, el cambio fue en las elites que recibían las rentas, por lo tanto, quienes seguían trabajando las tierras y explotando las minas, no sentían la necesidad de innovar o mejorar los procesos productivos, no existía sentido de pertenencia y tampoco de recibir beneficio alguno.

Por otro lado, en las primeras colonias de lo que ahora es Estados Unidos, la conquista británica y la dispersión de las confederaciones indígenas condujeron a que sean los colonos quienes desde el inicio cultiven y trabajen sus propias  tierras, las cuales eran menos productivas que las del sur; tras intentos fallidos de la corona inglesa por replicar la institucionalidad económica de la monarquía imponiendo loores dueños y administradores de grandes extensiones, los colonos y nacidos en el continente, fueron asumiendo la propiedad de las tierras, sus instituciones se ajustaron de tal manera que propendían a innovar la forma de trabajarlas. En los años posteriores las colonias iban aumentando su productividad, entonces el imperio volteo su mirada al continente y aplicó cargas tributarias, constituyendo uno de los motivos iniciales para el comienzo de las guerras de independencia, no era un simple cambio de elites, si no la defensa de sus instituciones económicas, y de su propiedad privada. Inclusive años después se aboliría la esclavitud.

Es válido preguntar ¿cuál ha sido el legado histórico de las instituciones económicas de la conquista/colonización   y la independencia?, probablemente pasa por la concepción que tiene la población del sur y la del norte, sobre trabajar tu propia tierra, emprender, invertir e innovar; la expectativa sobre la seguridad de los beneficios e incentivos a tener sobre las rentas; y, la confianza o seguridad en las leyes e instituciones estatales.

Otro punto a rescatar es la confidencia en el voto y las instituciones democráticas. En Ecuador y en casi toda Latinoamérica los cambios de gobiernos han estado ligados a etapas de democracia, golpes de Estado, revoluciones y fraude, mientras que, en Estados Unidos, desde Washington los cambios de gobiernos únicamente han sido a través del voto.

La comparación entre Corea del Norte y Corea del sur, el primero gobernado por una dinastía desde 1948, el segundo desde ese año ha pasado por republicas, revolución, golpes de estado y transición a la democracia. En Corea del Sur tras la toma del poder por Park Chung-Hee, en 1961,  inicia su despegue, una fuerte sinergia entre la inversión en capital humano, créditos y subsidios a las industria prosperas y el aperturismo con el mercado exterior, convirtió al país en una potencia económica mundial. Las instituciones y leyes económicas implementadas fueron diferentes en las dos naciones, de hecho, existe una polarización en cuanto a transferencia de tecnología, acceso a la educación, aperturismo comercial, inclusive en el sur a diferencia del norte existe el concepto de propiedad privada y contratos entre particulares, lo que incentiva a su población la innovación de procesos productivos y a mantener o incrementar la producción. (BBC, 2017) (BBC, 2015)

Actualmente no hay transparencia en la información de la Corea del Norte, no se podrían aseverar datos sobre sus empresas más exitosas si es que las hay, lo cierto es que exportan carbón, mientras que en el sur se tiene como emblemas a Samsung y Hyundai.

Finalmente, el surcoreano tiene más libertad para ingresar al mercado, pues por ley el servicio militar dura dos años, mientras que el norcoreano casi 10 años.

Fuente: Pichincha Universal

Es momento de abordar las instituciones económicas en Ecuador, para lo cual se dará por entendido que el país ha sido renuente al éxito, no es una nación prospera, este fracaso inicia con la comparación que tal vez sea lesiva al romanticismo popular, pero no deja de ser práctica: las expectativas económicas que puede tener un adolescente promedio cuyo hogar radica en los suburbios de Guayaquil o Quito, y un adolescente radicado en zonas exclusivas de las dos ciudades.

El primero es probable que crezca en un entorno de pobreza, sin una educación adecuada y a tiempo parcial pues debe trabajar, no estará cualificado para el mercado laboral especializado, a lo cual hay que sumarle la distancia o demora a acceder a nuevas tecnologías, con esto tendrá más barreras y a la vez desaliento a emprender, y probablemente las actividades informales de bajos ingresos, o inclusive ilegales, sean una opción debido a la necesidad ya que las instituciones, leyes e incentivos del Estado ecuatoriano no pueden disminuir la brecha que tiene con el segundo adolescente quien, es muy probable que acceda a una educación a tiempo completo, encontrará incentivos para su preparación formal, con posibilidad de trabajos mejor remunerados o crear su propio negocio, por el mayor acceso a la información de mercados financieros y de financiamiento; al final, no son las  habilidades personales de cada adolescente, su cultura, religión clima o geografía donde está su hogar,  si no las instituciones económicas patrocinadas por el Estado que han marcado históricamente su condiciones  socio económicas y a la vez sus expectativas. Se reitera, que la diferencia de vivir en un lugar o en el otro, no pasa por infraestructura de centros comerciales, bancarios, entidades públicas, edificios o urbanizaciones de alta plusvalía, si no por acceso a servicios básicos, centros de salud y educación de calidad cercanos, sistemas de transporte, conectividad; así como, las oportunidades que tengan las cabezas de sus hogares para obtener un trabajo digno.

A pesar de esta inequidad, la concepción que puede tener cada uno sobre las instituciones y leyes del Estado ecuatoriano, seguramente no es de las mejores. Este breve match también se lo puede hacer  con el mundo, si se piensa en un ecuatoriano o ecuatoriana con educación de tercer y cuarto nivel, versus alguien con la misma formación en Estados Unidos,  de los países del occidente Europeo o Rusia; tendrán diferentes expectativas del mercado laboral en sus países, sobre  un trabajo estable público o privado, diferente entorno sobre la salud y transporte, y finalmente cambiaría su percepción de  confianza en el estado y sus leyes sobre  el respeto a la  propiedad privada y a los incentivos que recibirán.

Pero qué pasa con los países que no son prósperos que tipos de instituciones tienen, a estas se las denominan extractivas, pues buscan extraer de un subconjunto de la sociedad rentas y riqueza para beneficiar a otro subconjunto dominante; aquellos que son exitosos tienen instituciones inclusivas, garantizan la igualdad de oportunidades económicas no solo para la elite si no para la mayoría del país, y velan por la seguridad jurídica y el derecho a la propiedad privada.

El Estado juega un rol fundamental en la seguridad jurídica de los derechos de propiedad, en el respeto a los acuerdos de privados, en garantizar servicios públicos, la libertad y regulación en el intercambio de mercancías de toda índole, evitar actividades ilegales y la corrupción entre públicos y privados.

La infraestructura que facilita y garantiza la educación, seguridad (no solo física si no jurídica), salud, transporte, transparencia, otras necesidades básicas, así como, los canales para un mercado más dinámico y respetuoso con el ser humano, es de gran escala, por lo tanto, los estados estarían en capacidad de que sus instituciones y leyes garanticen esta infraestructura.

¿Qué instituciones económicas se han implementado por el estado ecuatoriano?, ¿son inclusivas o extractivas? Para responder esta interrogante debemos recordar que la principal fuente de ingresos por exportaciones es el petróleo crudo, de 2007 a 2014 registró precios moderados y altos en el mercado internacional. La mayoría de campos petroleros y la exportación de petróleo es atribución de la administración pública, por lo que, gracias a las rentas resultantes y a la creciente recaudación tributaria el Estado ha mantenido su rol de interventor en la economía, primero con el aumento de entidades gubernamentales, luego con la construcción de infraestructura ligada a conectividad, transporte, electricidad, salud, educación, entre otros, también existieron programas de asistencia social, inclusive se puede hablar de la reducción de la pobreza y crecimiento económico, sin embargo tras la caída de los precios del crudo, dejó al desnudo la debilidad fiscal, de hecho la necesidad de endeudamiento con organismos o países extranjeros fue creciendo. Las instituciones económicas resultaron ser dependientes de un estado grande que su vez depende de los commodities y de la recaudación impositiva, y estas no incentivaron ni hicieron sostenible un crecimiento de nuevos emprendimientos ni del empleo. Sumado a eso las instituciones no pudieron evitar el fraude ni la corrupción, a pesar de una nueva Constitución y reformas a Leyes y Códigos Orgánicos.

Según el estudio realizado por Carrión (2019), entre 2013 y 2017, los ingresos de los 27 principales grupos económicos aumentaron casi 3000 millones. Si bien existió un aumento de los ingresos reales de los empleados públicos y privados, que ayudó a incrementar el consumo en el mercado interno, también trajo consigo mayor importación de bienes y servicios, el aumento de salarios en el sector publico solo duró hasta el desplome de los precios del crudo. Además, el manejo el impuesto al valor agregado como fuente de ingresos fiscales, amnistía tributaria, y otras condonaciones de deudas dirigidas a grandes empresas, favoreció a estos grupos.

Posteriormente, desde 2017 a 2019 los activos de los principales grupos económicos incrementaron en casi 9.000 millones de dólares y su patrimonio en 1.400 millones de dólares (Valencia, 2020).  A la par se disminuyó la masa salarial en el sector público, y en 2020 la pandemia trajo consigo una crisis mundial.

Fuente: El Telégrafo

Pero los otros subconjuntos de la población, ¿lograron ser partícipes de los beneficios arriba señalados?, pues los indicadores de pobreza muestran niveles similares entre 2013 y 2019, 25,6% y 25% respectivamente, y en cuanto al coeficiente de Gini 2019 y 2012 son 0,477 y 0,473 respectivamente. No se considera al 2020 donde estos indicadores crecieron debido al impacto pandemia. Los niveles de pobreza y la desigualdad siguen igual. (INEC, 2020).

Según cifras del INEC, el número de empresas con actividades productivas en 2013 alcanzó las 87.262, valor ligeramente superior al del 2019 (87.039). El mismo comportamiento 2013 – 2019 se repite en las ventas generadas a valores constantes (115 a 113 mil millones de dólares), como el empleo registrado en el IESS (1,55 millones a 1,53 millones) (INEC, 2020).  Finalmente, otro dato a considerar es que la tasa de desempleo al finalizar 2019 a nivel nacional alcanzo 3,8% mismo valor al finalizar 2014 (INEC, 2021).

A la luz de estos datos, se entiende que fracasamos, las instituciones económicas en el país no soportaron la caída de los precios del crudo en 2014, no incentivaron y no dieron continuidad a la innovación y emprendimiento, son extractivas pues los grandes grupos económicos siguen manteniendo su estatus, mientras los otros subconjuntos no se benefician a la par: estos grupos económicos fueron los únicos que incrementaron su riqueza, mientras que la pobreza y la desigualdad en 2019 volvió a los niveles de 2013, de igual manera el número de empresas y empleos generados, son los mismos de 2013 (no se considera 2020 por la pandemia). NO existe igualdad de oportunidades ni beneficios.

¿Pero qué hacer? Las recetas están dadas, de hecho, no hay que inventar nuevas instituciones económicas, simplemente deben aplicarse acorde a la realidad ecuatoriana, las que ya tuvieron éxito en otros países, donde el Estado jugó un rol fundamental apoyándose en un inicio en potenciar las ventajas competitivas de cada país, y en este país son los recursos primarios como los agrícolas, acuícolas, hidrocarburos, flora y fauna en la amazonia. Las leyes económicas, a partir de estos recursos deberían tener como objetivo ir hacia los siguientes pasos la agroindustria, petroquímica, refinación, farmacéutica, energías renovables, entre otros. Esto se logra con instituciones que incluyan a la mayoría de la población, por lo tanto, las reformas deben ir enfocadas a potenciar esas ramas de actividad económica, ligar el aparato educativo, incentivando a empresarios a la inversión para generar nuevas plazas de trabajo; en realidad es inoficioso mayor recaudación impositiva y menos empleo, junto a un estado que no sabe administrar los presupuestos por sus instituciones débiles y corruptas. Las instituciones y leyes económicas, deben estar diseñadas de tal manera que se garantice el acceso y continuidad de medianas y pequeñas empresas (capital semilla, créditos a tasas bajas, flexibilidad laboral sin golpear un trabajo digno, asesoramiento y seguimiento), pues como se nota a cualquier situación económica en la última década, los grupos grandes siguen acumulando riqueza, quienes no fueron protegidos pertenecen a otro subconjunto de la sociedad.

A la par, la competencia estatal sin ecua non es mejorar el sistema de salud e invertir en capital humano acorde a las mejores prácticas mundiales (experiencia del Estado de bienestar europeo y diferencias entre países occidentales centrales y orientales: aplicabilidad para Ecuador), esto, brindará al mercado ecuatoriano de talento humano sano y capacitado, por ende, más productivo e innovador.

Si los empresarios y emprendedores se encuentran con seguridad jurídica,  reglas claras para inversiones, respeto a los contratos y propiedad privada,  (depuración de sistema de justicia: agravar penas y mejorar transparencia, según mejores prácticas internacionales, países con menores índices de corrupción y delito) apertura y dinamismo en el mercado con responsabilidad ambiental y social (el Estado tiene que castigar las malas prácticas y la corrupción),  más una población calificada el resultado esperado será seguramente la prosperidad.

Estas ideas es lo que en un inicio “debería ser”, habrá otros factores como las relaciones internacionales, la deuda, los contratos de preventas, intereses políticos, los fundamentalistas retrogradas de izquierda y derecha, pero se debe recordar que cado país tuvo su reto al iniciar, Estados Unidos, Japón, Corea del Sur, Singapur, Chile, ninguno inició de cero y sin problemas internos o externos, inclusive la corrupción es una variable presente en cada país.

Lamentablemente a la presente fecha, un día luego de la segunda vuelta electoral, en Ecuador no hay igualdad de oportunidades (ni en la vacunación contra la COVID 19), tampoco instituciones que brinden incentivos empresariales, ni fomento del capital humano, en realidad está en duda si logran garantizar salud y educación de calidad a los ciudadanos, tampoco son transparentes y demoran para castigar el fraude y las prácticas deshonestas, hasta que los hechos ven la luz pública por medios de comunicación. Se mantiene la desigualdad pues no ha cambiado significativamente el mapa de crecimiento y distribución de la riqueza, además, la dependencia de los precios del crudo sigue jugando a los ciclos con la economía nacional, es decir, las instituciones ecuatorianas son extractivas no inclusivas, es por eso que seguimos fracasando.

Bibliografía:

Acemoglu, D., & Robinson, J. (2012). Why Nations Fail: The Origins of Power, Prosperity, and Poverty. Nueva York.

BBC. (2015). ¿Cómo logró Corea del Sur su milagro económico?

BBC. (2017). Corea del Norte vs. Corea del Sur: 9 gráficos para entender cómo se vive en el país más hermético del mundo.

Carrión, L. F. (2019). FORTALECIMIENTO DE LOS GRUPOS ECONÓMICOS EN EL ECUADOR EN LA ÚLTIMA DÉCADA. REVISTA ECONOMÍA, 35-71.

INEC. (2020). Directorio de Empresas y Establecimientos 2019. Obtenido de https://www.ecuadorencifras.gob.ec/documentos/web-inec/Estadisticas_Economicas/DirectorioEmpresas/Directorio_Empresas_2019/Principales_Resultados_DIEE_2019.pdf

INEC. (2020). Encuesta Nacional de Empleo, Desempleo y Subempleo (ENEMDU). Obtenido de https://www.ecuadorencifras.gob.ec/documentos/web-inec/POBREZA/2020/Diciembre-2020/202012_PobrezayDesigualdad.pdf

INEC. (2021). Encuesta Nacional de Empleo, Desempleo y Subempleo 2021. Obtenido de https://www.ecuadorencifras.gob.ec/documentos/web-inec/EMPLEO/2021/Febrero-2021/202102_Mercado_Laboral.pdf

INEC. (2012). Instituto Nacional de estadísticas y censos. Obtenido de https://www.ecuadorencifras.gob.ec/documentos/web-inec/Estadisticas_Sociales/Filiacion_Religiosa/presentacion_religion.pdf

Valencia, J. B. (2020). Instituto de investigaciones economicas UCE. Obtenido de Los grandes ganadores del Gobierno de Moreno: Grupos Económicos 2017-2019, riqueza, salida de divisas, paraísos fiscales y deuda tributaria.: https://coyunturauceiie.org/2020/06/14/los-grandes-ganadores-del-gobierno-de-moreno-grupos-economicos-2017-2019-riqueza-salida-de-divisas-paraisos-fiscales-y-deuda-tributaria/

Máster en Economía por la Universidad Complutense
Especialista en Gerencia para el Desarrollo por la UASB
Economista de la Universidad Central
Especialista en Desarrollio y Politica Hidrocarburifera
Ex Subsecretario de Estado y Viceministro de Hidrocarburos (e)

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