El rumbo económico de Lenín Moreno, ¿Qué es el progresismo moderno?

El rumbo económico de Lenín Moreno, ¿Qué es el progresismo moderno?

Han pasado 16 meses desde que Lenín Moreno asumió formalmente la Presidencia de la República, pocos habrían imaginado en ese momento que el llamado a ser garante de la continuidad del correismo, daría un giro de 180 grados en la visión política del gobierno central.

El (mal llamado) socialismo del siglo XXI ha sido, en palabras del presidente Moreno, reemplazado por el “progresismo moderno”.

Así nace una nueva categoría dentro de la política, misma que aún no cuenta con una definición formal de su ideología, principios y propósitos. Lo único que se conoce hasta el momento es el atisbo de lo que podrían ser sus ejes fundamentales: atención a los más necesitados, profundización de la democracia, pragmatismo para resolver los problemas, la capacidad de los pueblos para encontrar su futuro y la transparencia.

Los enunciados económicos y la relación entre los actores de una sociedad, son la parte medular de las diferentes doctrinas políticas que los gobiernos adoptan para el ejercicio del poder. Es por ello que resulta complejo definir al progresismo moderno de Lenín Moreno. Si utilizamos el accionar económico del gabinete para desentrañar los principios filosóficos de este progresismo, veremos señales difusas sobre el rumbo que se quiere adoptar. Es evidente que la orientación política del gobierno está influenciada de manera significativa por el neoliberalismo; las leyes en materia económica y las medidas adoptadas han tenido una clara intencionalidad de beneficiar al capital y a los grandes sectores empresariales a costa de conquistas conseguidas por la sociedad civil y del debilitamiento real del poder regulatorio del Estado. La apropiación de las recetas económicas de la derecha, que plantean a la austeridad y la desregulación como estímulos favorables para la economía; demuestran el deseo de un acercamiento formal con organismos multilaterales de crédito, más aún cuando personajes como Richard Martínez, actual Ministro de Finanzas, representante de los gremios empresariales y acérrimo defensor de la necesidad de detener el endeudamiento externo de la nación, ha reconocido públicamente que continuar adquiriendo deuda es necesario.

En conclusión, si debiéramos definir al progresismo moderno en base únicamente al desempeño político y económico del régimen, se observaría una tendencia de centro derecha, que no teme  trabajar de la mano con los grandes grupos económicos y que prioriza al empresariado por sobre el ciudadano. Sin embargo está consciente de que la base política electoral que lo llevó al poder sigue de cerca su desempeño, por lo que ha estructurado una campaña mediática bastante sincronizada que posiciona dos temas fundamentales: por un lado la cruzada social denominada “Plan Toda Una Vida” de la cual no se tiene mayores resultados; y por otro lado un baño de trasparencia, que se ha basado en desenmascarar la corrupción latente en el correismo sin recuperar mayor parte de lo robado. Esta estrategia comunicacional ha permitido que el marketing político se posicione por sobre la evaluación ciudadana, una cortina de humo ha alejado a ciudadanía y sectores sociales de mirar objetiva y analíticamente el rumbo económico que el Ecuador está tomando, y del cual deberíamos estar preocupados.

Economista ecuatoriano graduado en la Universidad Central del Ecuador, con experiencia relevante en análisis estadístico, financiero y de gestión pública. Interesado en la construcción de políticas inclusivas y democráticas con visión socio-económica.

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Un comentario en «El rumbo económico de Lenín Moreno, ¿Qué es el progresismo moderno?»

  1. Si no es ese el rumbo de la economia ecuatoriana, como usted cree que podria ser la misma?, y a que sectores empresariales pidria acudir Lenin Moreno si el Ecuador no es un pais de ecomia mixta. Cuales serian entonces los buenos empresarios.

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